La asociación REDES, Renovación de la Educación y Defensa de la Enseñanza, repudia y rechaza la brutal violencia sistemática y genocida ejercida por el Estado de Israel contra el pueblo palestino a raíz del atentado terrorista cometido por la organización Hamas.
Esta violencia, que no es nueva sino sistemática, ha ocasionado más de 35.000 víctimas mortales de las que una buena parte son menores. Israel ha incumplido todas las resoluciones que la ONU ha emitido en relación a su actuación contra la población palestina desde 1947, negándose permanentemente a la creación de los dos estados que estaba incluida en los protocolos de creación del propio estado de Israel. Así mismo está usurpando por la fuerza tierras que no le pertenecen y armando a los colonos ocupantes para repeler con violencia cualquier intento de recuperación de esos terrenos por sus legítimos propietarios.
La respuesta al ataque perpetrado por la organización Hamas el pasado octubre, no le da derecho a practicar la política de exterminio genocida sistemático que está llevando a cabo en la franja de Gaza, ni a privar (mediante su destrucción) de los recursos sanitarios y de higiene a la población gazatí, así como utilizar el hambre como recurso de guerra al prohibir la entrada de alimentos, medicinas y otros recursos básicos.
La destrucción planificada y ejecutada mediante bombardeos de todo el sistema educativo de la franja (desde la enseñanza básica a la superior), unida al de su sistema sanitario, energético y de saneamiento, solamente se explica por el deseo genocida de erradicar a la población palestina de su lugar ancestral de residencia, ya sea mediante su eliminación física o mediante la expulsión, tal como sucedió el 16 de mayo de 1948.
Por todo ello, la asociación REDES, manifiesta su solidaridad con todas las acciones y campañas que se están llevando a cabo en apoyo a Palestina, especialmente las protagonizadas por los centros educativos, a cuyo profesorado corresponde una función importante en su labor de educación sobre los derechos humanos y la historia. Además, hace un llamamiento a los gobiernos español y autonómicos, a las empresas, Universidades y centros de investigación, etc., a fin de que utilicen todos los medios a su alcance para presionar al estado de Israel a que decrete un alto el fuego y abandone su política de exterminio, suspendiendo, hasta tanto, todo tipo de relaciones con dicho estado y sus terminales. Asimismo, insta a las mismas instituciones y a la Unión Europea a apoyar los esfuerzos de la UNRWA y de otras organizaciones en su labor por mitigar el sufrimiento de la población palestina.