Ayer, 30 de mayo se ha publicado en el BOJA la composición de los 466 tribunales de Educación Infantil y Primaria. Un total de 2330 personas que, en su inmensa mayoría, son docentes en activo, se verán afectadas y no podrán asistir a sus centros educativos durante la última semana lectiva del curso escolar y, posiblemente, durante varias jornadas más.
Los docentes y equipos directivos seleccionados dejarán sus aulas y sus obligaciones por tener que acudir a un tribunal. ¿Serán sustituidos en sus puestos por otro profesorado que envíe la Consejería de Educación y Deporte? De no ser así, y es lo que nos tememos, decenas de miles de alumnos y alumnas de Andalucía se verán perjudicados en el normal ejercicio de su derecho a la educación, y sus centros educativos tendrán que apañarse como puedan para sobrellevar la situación y cerrar de esta forma tan anómala el curso escolar, probablemente, más complicado que hayamos tenido.
¿No se podía hacer de otra manera? ¿Otra vez la falta de planificación y la pésima gestión a costa del alumnado y los centros públicos? Una vez más, la Consejería de Educación y Deporte y el gobierno andaluz muestran el escaso interés que tienen por la escuela pública.